Muchas son las veces que los que nos dedicamos al mundo del Software, y que una parte la dedicamos al Cloud Computing, nos encontramos con el típico cliente reacio a tener sus datos (“su vida” según nos definen algunos) en un lugar “lejano”, en un lugar “no seguro”.

La sensación de estos clientes es que, si tienen los datos fuera de sus dependencias, tienen mayor fragilidad ante un ataque. Y nosotros, los que nos dedicamos a esto del Software, y del Cloud Computing, les decimos, una y otra vez, que los datos en la nube van a estar mucho más seguros que los datos en servidores “at office”.

¿Por qué podemos hacer esta afirmación de manera tan tajante? Por un tema de inversión en seguridad, simplemente. ¿Cuánto has invertido tú, en tu casa, en tus servidores, en seguridad? ¿Crees que es un dineral? Y si te digo que una empresa como Amazon, que se dedica al Cloud Computing en gran parte, o Microsoft, a través de su servicio Azure, invierten millones de € al año en seguridad, ¿sigues creyendo que lo que tú has invertido es un dineral?

Estamos a finales del año 2017, los ataques hackers cada vez son más sofisticados, y esto implica que los sistemas de prevención cada vez tengan que ser más sofisticados. Cada una de las empresas que forman el tejido empresarial, tienen que invertir mucho dinero si no quieren ser vulnerables y, ante esta tesitura, yo me pregunto: ¿no es más fácil trabajar con sistemas de Cloud Computing y pagar por un servicio?

Tenemos que ir acostumbrándonos, como sociedad, que la tendencia del mercado es a sistemas tipos SAAS, o pago por uso. De esta manera, nos garantizamos que estamos siempre en la vanguardia y, en caso contrario, si el proveedor no está en esa vanguardia, cambiar de proveedor, que será relativamente sencillo. Por lo menos, será más sencillo que si has invertido una fortuna en licencias de un software, o en hardware potente.

Desde RIC.DOC sabemos que sois muchos los que os sentís identificados con “el miedo”, pero nosotros, tozudos que somos, nos empeñamos en demostraros que estáis errados. ¿Nos dejas demostrártelo? Con una simple conversación, creemos que nos basta. Búscanos, estaremos encantados.