En pleno siglo XXI, aquellas empresas que no hayan realizado o tenido en cuenta a corto plazo la transformación digital de su modelo de negocio quedarán “fuera de juego” o desbancadas por sus inmediatos competidores los cuales sí hayan realizado dicha transformación, por lo que aquellas empresas que aún no lo hayan hecho deberían tomárselo como un reto.

La transformación digital es el uso de la tecnología en el modelo de negocio en el qué si se realiza correctamente optimizará los procesos internos de la empresa, eliminará el uso de papel y en consecuencia, incrementará las cifras de volumen de negocio a medio y largo plazo. El planteamiento de dicha transformación debe ser estudiada y analizada previamente para que no se produzcan los típicos errores que cometen muchas empresas al realizar dicha transformación:

 1.No concienciar en y a todos los niveles

Todos los departamentos de la empresa, desde dirección hasta el departamento de administración, pasando por marketing, producción, recursos humanos, etc. deben estar concienciados e implicados en dicho proceso. Esto no quiere decir que el cambio se deba realizar en todos los departamentos a la vez, sino que debería hacerse paulatinamente.

Incluso en la relación con clientes y proveedores debe haber un acercamiento y consenso en la medida de lo posible para llevar a cabo la transformación. Hay que tener claro que la transformación digital debe estar centrada en el cliente.

2.Realizar la misma transformación que la competencia

Elegir el mismo proceso de transformación que el de la competencia no tiene por qué funcionar en nuestra empresa. Cada empresa tiene unos procesos internos que en mayoría de los casos no corresponden con los de la competencia, por lo que el proceso de transformación debe ser distinto y adecuado al modelo de negocio y los procesos internos.

 3.Desistir demasiado pronto

Se da el caso de qué en pequeñas empresas y con empleados de avanzada edad, el hecho de realizar el cambio supone demasiado coste al inicio, por lo que muchas empresas prolongan demasiado en el tiempo esta transformación, a veces incluso, aparcándola. En este punto, la dirección de la empresa es clave en poner todos los medios para que esto no suceda.

 4.Elegir un proceso demasiado ambicioso para el tipo de empresa

Un ejemplo claro sería que en una empresa de tipo familiar quisiera trabajar con alguno de los ERP’s más importantes del mercado y pensados para tipos de empresa con gran volumen de negocio. El coste de la inversión un compensará los beneficios de la transformación digital y el aprendizaje será muy costoso.

5.No contar con profesionales experimentados

El hecho de aplicar una transformación digital sin contar con profesionales experimentados y cualificados como expertos en marketing digital, Big Data y Business analytics, etc. seguramente conllevará a realizar errores que hubiesen sido detectados por estos profesionales.

6.No contar con servicios de consultoría de transformación digital

Ligado al punto anterior, también es necesaria una fuente externa que nos ayude a entender y desarrollar el cambio más eficiente para la empresa debido a la experiencia y visión global que tienen según los diferentes escenarios.

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